Bunkers: con una pequeña ayuda…
Por el Ing. Agr. Ricardo de Udaeta.
Cuántas veces habremos entrado y salido de un bunker con dificultad. Suele ocurrir que algunos bunkers tienen paredes tan empinadas que resultan sumamente difíciles para descender, o bien para trepar luego de haber sacado la pelota del búnker. Y no me refiero solamente a las personas mayores, sino a la mayoría de los jugadores incluyendo a los más jóvenes.
En algunos clubes nos encontramos con una ayuda para que el jugador pueda entrar y salir del bunker. Una simple escalera puede ser suficiente para evitar el deterioro que ocasionarían los jugadores subiendo y bajando por la pared de césped, y también para evitar posibles accidentes producto de tener que escalar paredes tan empinadas. En algunos casos las paredes de los bunkers también pueden ser de arena, para lo cual puede resultar beneficiosa la incorporación de una escalera en algún sector del bunker dónde esta no interfiera con el juego.
Una sencilla alternativa para un problema que, por lo general, puede ser complejo y probablemente no tenga otra solución.