¿Por qué se producen estas ondulaciones?

Un efecto de ondulación en el césped, a menudo llamado «tabla de lavar», suele observarse en pendientes y zonas que se cortan con frecuencia en la misma dirección. Encontrar formas de cambiar el patrón de corte puede ayudar, pero puede ser necesario tomar medidas más agresivas.

Por Zach Nicholudis, Regional Director, Central Region, USGA Green Section.

La temporada baja ofrece un momento oportuno para llevar a cabo proyectos que perturban mucho el juego. Aparte de los proyectos normales de fuera de temporada, como el mantenimiento de los árboles y la instalación de drenajes, la solución de problemas como la «tabla de lavar» puede figurar en la lista de prioridades. La «tabla de lavar» es un patrón ondulado en el césped que puede afectar la apariencia del campo y su jugabilidad, especialmente si la bola de un golfista cae en uno de los puntos bajos de una ondulación.

Este problema tiende a ser más pronunciado en las pendientes del rough y en las zonas donde el corte se realiza en la misma dirección repetidamente. La velocidad de funcionamiento de la cortadora y los mayores niveles de materia orgánica también pueden influir en el desarrollo de la «tabla de lavar». Las unidades de corte tienden a rebotar más a altas velocidades y, una vez que empiezan a rebotar, pueden crear un patrón repetitivo de altos y bajos en el césped. Las condiciones más blandas creadas por niveles más altos de materia orgánica también aumentan la probabilidad de que se desarrollen ondulaciones.

Los ajustes más sencillos para la próxima temporada son reducir la velocidad de funcionamiento de las cortadoras de rough y cambiar la dirección de corte. Sin embargo, ambos pueden afectar a la eficacia operativa y cambiar la dirección de corte puede no ser una opción en algunas zonas debido al tamaño de las máquinas y al diseño del campo de golf.

Realizar prácticas de gestión cultural como la aireación con sacabocados y el corte vertical puede ayudar a reducir la «tabla de lavar». Utilizando un enfoque específico donde el problema es más grave puede ayudar a hacer el mejor uso de su tiempo. Es posible que tenga que realizar estas prácticas varias veces para lograr el objetivo final. También puede ser ventajoso pasar un rolo o utilizar otro método para alisar aún más las zonas tratadas cuando haya humedad adecuada en la zona radicular, pero la gravedad de la pendiente puede limitar las prácticas que puedan realizarse y dónde. Siempre que el tiempo acompañe, el final del invierno o el principio de la primavera son momentos oportunos para tomar medidas más agresivas para reducir este efecto.

En situaciones graves o si se requieren resultados inmediatos, la mejor opción es reemplazar los panes de césped, pero tiene un costo más elevado. La temporada baja puede ser un momento adecuado para reempanar zonas de gran visibilidad si el tiempo acompaña. Si se opta por esta estrategia, es importante contar con un plan para reducir el riesgo de que este fenómeno se repita en el futuro.

La «tabla de lavar» también puede producirse en los fairways y los tees, donde suele ser el resultado de cortar repetidamente con un patrón de mitad y mitad. Invertir el patrón y cortar de lado a lado cada una o dos semanas puede ayudar a reducir el problema. La «tabla de lavar» también puede ser una señal de que los niveles de materia orgánica son elevados y es necesario ajustar el programa de gestión cultural. Para obtener más información sobre cómo solucionar este y otros problemas, póngase en contacto con su agrónomo regional de la USGA.